La calidad del agua en la ciudad es cada vez más preocupante. Los habitantes no solo enfrentan costos elevados, sino que también deben lidiar con agua insalubre. La Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS) está bajo fuertes críticas por parte del regidor Pedro Matus Peña debido a su ineficiencia en la prestación de servicios básicos.
Diversas colonias han reportado que, a pesar de múltiples solicitudes y denuncias sobre la falta de agua, no han recibido atención, dejándolos privados de este recurso vital.
La situación se agrava por la mala calidad del agua suministrada. Muchos residentes se ven obligados a comprar agua embotellada porque el agua potable no es apta para el consumo humano, lo que representa un gasto adicional significativo para las familias. Esta falla en la responsabilidad de la JMAS de garantizar agua de calidad es una grave preocupación, según comentó el regidor Pedro Matus Peña.
Matus Peña expresó su alarma ante esta problemática, señalando que, en lugar de buscar soluciones, la descentralizada se ha enfocado en embargos de propiedades, incrementando los casos de 13 a 300 en poco tiempo. «Es como si viviéramos en el siglo 18», lamentó el regidor, criticando la indiferencia de los funcionarios de la JMAS. Según él, estos funcionarios disfrutan de lujos como camionetas nuevas y oficinas bien equipadas, mientras descuidan sus responsabilidades hacia la ciudadanía.
La comunidad espera que las autoridades tomen medidas urgentes para resolver estos problemas y garantizar el acceso a agua potable de calidad para todos los habitantes.