Con el inicio de las altas temperaturas, la demanda de agua potable en Ciudad Juárez ha aumentado un 30 por ciento, según informó el director ejecutivo de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS), Sergio Nevárez Rodríguez.
Esta demanda adicional está poniendo a prueba la infraestructura de la ciudad, que actualmente tiene un abasto de agua del 85 por ciento.
El aumento en la demanda de agua no es el único desafío. La alta demanda de energía eléctrica está provocando apagones que afectan a los pozos y a la red de suministro de agua potable, complicando aún más la situación.
Estos cortes de energía han tenido un impacto significativo en la capacidad de la JMAS para mantener el suministro constante de agua.
Para enfrentar esta crisis, la JMAS ha puesto en funcionamiento una docena de pipas adicionales, con el objetivo de llegar a los hogares que no tienen acceso directo al agua potable.
«Con pipas traemos alrededor de 17 mil familias, que reciben el agua todos los días a través de 45 camiones que tenemos; todos los días salen a hacer sus recorridos a los hogares donde no tienen el servicio de agua potable», explicó Nevárez Rodríguez.
A pesar de estos esfuerzos, la situación sigue siendo crítica debido a la combinación de factores como el incremento en la demanda de agua y los problemas de energía. La JMAS está trabajando arduamente para mejorar el alcance y la eficiencia del suministro de agua, pero los desafíos son significativos.
Nevárez Rodríguez enfatizó la necesidad de medidas adicionales y el apoyo continuo de la comunidad para superar esta crisis. Con la llegada del verano y las temperaturas elevadas, es crucial que tanto las autoridades como la población tomen acciones para conservar el agua y garantizar su disponibilidad para todos los habitantes de Ciudad Juárez.
Esta situación subraya la importancia de la infraestructura y la planificación en la gestión de recursos esenciales como el agua, especialmente en regiones propensas a sequías y altas demandas durante los meses de calor.
