Ciudad Juárez, 17 de mayo de 2024 – Ciudadanos que acusan de fraude a Mario de Alba han denunciado públicamente que este se ha valido de su influencia para evadir responsabilidades legales, utilizando a sus familiares en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y la Fiscalía General del Estado (FGE) para sus fines.
Ignacia López Giménez, conocida como «Nachita», afirmó que Mario de Alba utilizó a su hija, quien trabaja en la CEDH, para simular una intervención durante el desalojo de sus viviendas.
Según López Giménez, esta acción fue percibida como una burla por parte de los afectados.
Además, López Giménez mencionó que otro familiar de De Alba trabaja en la FGE, lo que le ha permitido influir en el proceso y evadir las denuncias en su contra.
Los ciudadanos han intentado denunciar a Mario de Alba por fraude, pero afirman que, debido a sus conexiones, la FGE no aceptó su denuncia.
«Valiéndose de esa influencia, no nos aceptaron la denuncia como fraude en contra de Mario de Alba en la Fiscalía General del Estado», declaró López Giménez.
Cecilia Fernanda Rivera, otra de las afectadas, describió cómo la visitadora de Derechos Humanos, llevada por Mario de Alba durante el desalojo, hizo una simulación de atención que resultó ser una burla.
Rivera manifestó la frustración y el sentimiento de impotencia que sufrieron al ser desalojados de los terrenos que Mario de Alba les había entregado previamente.
Las acusaciones contra Mario de Alba han generado un fuerte sentimiento de injusticia entre los afectados, quienes ven en sus conexiones familiares una barrera que impide que se haga justicia.
Los ciudadanos afectados piden una intervención más estricta por parte de las autoridades competentes para que sus denuncias sean escuchadas y se tomen las medidas necesarias contra las supuestas irregularidades cometidas por De Alba.
