La columna del cucuy

La dirigente estatal de Morena Brigithe Granados de la Rosa, sobrina del delegado estatal de Bienestar Juan Carlos Loera, intenta meter mano en el grupo edilicio que domina políticamente el Cabildo de Ciudad Juárez atropellando al partido Nueva Alianza Chihuahua integrante de la Coalición Juntos Hacemos Historia.
Por invitación de la presidenta estatal de Morena, la regidora Vanesa Mora de la O abandonó a los ediles de Nueva Alianza Jorge Bueno Quiroz y Karla Escalante Ramírez con quienes llegó al Ayuntamiento, para sumarse a la fracción edilicia de Morena cuyos regidores en primera instancia desconocen sus intenciones.
La regidora notificó a la Secretaría del Ayuntamiento su renuncia a la fracción de Nueva Alianza y su adhesión a Morena como también lo hizo en su momento al grupo edilicio del Partido del Trabajo la regidora Cecilia Reyes Castro ahora integrada a Morena.
La decisión sin consensar con el presidente Municipal Cruz Pérez Cuéllar o con la coordinadora de la bancada morenista, la regidora Ana Estrada, sorprendió al Ayuntamiento que este miércoles también sufrió convulsiones provocadas por la división que sufrió el grupo edilicio del Partido Acción Nacional tras la elección del domingo en la que el gran derrotado fue el regidor Job Quintín Flores que hasta las intenciones de ser consejero le fueron arrebatadas.
Los panistas se trenzaron en una disputa en contra de la regidora Alma Edith Arredondo y lograron mandar a la congeladora un donativo de 100 mil pesos que estaba destinado a una Fundación médica con la que la edil gestionaba instalar un dispensario médico en la Coordinación del Adulto Mayor también de su autoría.
Amparo Beltrán quien aspira a quitarle la coordinación en el Cabildo a Job Quintín, fue quien le puso el cascabel al gato cuestionando el uso transparente de los recursos, mientras que el doctor Víctor Manuel Talamantes logró imponer sus argumentos médicos y con esto romper la esperanza de tener un banco de medicamentos exclusivamente para personas de la tercera edad.
Al tomar la palabra la edil panista Alma Arredondo explicó el principal propósito que era tener un banco de medicamentos gratis para las personas de la tercera edad, era tal el razonamiento que el propio alcalde, argumento que lo convencía.
Al convulsionado Cabildo se unieron este día las regidoras Mary Adame y Mayra Castillo que más por ver por los derechos de la infancia, apostaron por el sacerdote Aristeo Baca Baca sentenciado a 34 años de cárcel por violar y abusar de una niña. Adame votó en contra de que le retirarán la presa Fray García de San Francisco, mientras que Mayra se sumó a los seis panistas en la abstención, considerando que los blanquiazul tradicionalmente han sido aliados de la iglesia católica, que a propósito, este día también echaron mano del padre Eduardo Hayen para atacar al Ayuntamiento responsabilizándolo de problemas añejos del Centro Histórico como el ambulantaje pero que en realidad llevaba represalia por el retiro de la Presea Fray García al todavía sacerdote Aristeo Baca Baca que actualmente está resguardado en un asilo de la Iglesia Católica en vez de la prisión.